viernes, 26 de abril de 2013

El infierno está en la Tierra

El verdadero infierno se encuentra en el interior de la Tierra.

Ayer se hizo publica la verdadera temperatura del núcleo terrestre.

Los científicos han determinado que su temperatura es de 6.000ºC, 1.000 grados más de lo que se estimó hace 20 años en el último experimento.
Estas mediciones confirman modelos geofísicos que estipulan que la diferencia de temperatura entre el núcleo sólido y el manto superior de nuestro planeta debe de ser de al menos 1.500 grados para explicar por qué la Tierra tiene un campo magnético.
El núcleo de la Tierra se compone principalmente de una esfera de hierro líquido a temperaturas superiores a 4.000ºC y presiones de más de 1,3 millones de atmósferas. En estas condiciones, el hierro es tan líquido como el agua en los océanos. Es solo en el centro de la Tierra, donde la presión y el aumento de la temperatura es aún mayor, que el hierro líquido se solidifica. El análisis de ondas sísmicas provocadas por terremotos que pasan a través de la corteza terrestre, revelan el espesor de los núcleos sólidos y líquidos, e incluso la forma en que la presión aumenta con la profundidad.
Sin embargo, estas ondas no proporcionan información sobre la temperatura, que tiene una influencia importante en el movimiento del material dentro del núcleo líquido y el manto sólido anterior. De hecho, la diferencia de temperatura entre el manto y el núcleo es el principal impulsor de los movimientos térmicos a gran escala, lo que unido a la rotación de la Tierra, actúa como una dinamo generando el campo magnético del planeta.